El comercio mundial está basado en el movimiento de contenedores que han de ser rápidamente cargados y/o descargados una vez que el barco atraca en el puerto. Los sistemas de carros portacables pesados necesitan en este caso un trabajo continuo con el menor tiempo de operaciones de mantenimiento posibles. Los puertos interiores denominados “secos” también necesitan del uso de estos sistemas para la carga y descarga de contenedores para su envío por ferrocarril o carretera.